Mole Negro Mayordomo
El nombre de “mole” viene de la palabra náhuatl “milli” o “mulli”, que significa salsa. De lo poco que se conoce se dice que la monja Sor Andrea de la Asunción ideo elaborar este preparado para una visita del obispo don Manuel Fernández de Santa Cruz, el virrey Conde de Paredes y el Marqués de la Laguna. Para obtener un platillo único y representativo mezcló en un metate: Ajonjolí, clavo, pimientos, cacahuates, canela, almendras, anís, comino, jitomates, cebolla, ajo, tortilla y chocolate.
El resultado fue una masa pastosa color negro, la cual mezclaron con caldo de y al combinarlos se creó el primer mole. Un platillo de gran olor, oscuro color y sabor dulce al igual que picante. Al juntar sus extraordinarios ingredientes este platillo puede no ser apto para cualquier paladar, sin embargo, en el año 2010 la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) declaró que gracias a su historia, diversidad y trascendencia este platillo era reconocido como parte del patrimonio culinario cultural del país.
Desde entonces el MOLE NEGRO nace en Oaxaca y suele ser dulce. Este platillo típico se sirve, especialmente, el día de muertos y para prepararlo se llegan a usar hasta 30 ingredientes. Es oscuro por los chiles negros, rojos, mulatos y pasilla que usan para prepararlo, al igual que es dulce por el chocolate, cacahuetes, plátanos macho y especies que usan.
En caldo de pollo, caldo de guajolote, caldo de codorniz, caldo de puerco o el clado que se encuentre disponible en la cocina, este mole sabrá delicioso. Sus emplatados lucen elegantes, dado a que su oscuro color brinda la seriedad que se necesita en festividades formales. Es óptimo para niños o extranjeros a quienes no les guste el picante.
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